¿Los sueños se hacen realidad? Capítulo 3.

Por la noche fui al cuarto de mi hermano.

Daniel se había alojado en el dormitorio de Jack,donde había dos camas.

Anne se había marchado a una casa alquilada que estaba situada en la plaza del pueblo.

Estaba sentada en la cama con las piernas cruzadas, en frente del ordenador , donde estaba mi hermano mayor.

De repente, escuché las voces de mi madre regañando a mi hermana porque siempre estaba en medio y diciendole a Jack que se duchara de una vez.

Miré a la puerta cerrada de la habitación y dije con tristeza en voz baja:

-Ya empezamos. Otra vez.

Daniel se giró y me vio con la cabeza gacha.

-Ana, mírame.

Como yo no lo hice, me cogió la barbilla y me alzó la cara para que lo mirara.

-¿Qué te pasa?-dijo mi hermano, aún manteniendo mi cara con su mano.

-Nada.

-Sí, ya. Venga, Ana. Que ya nos conocemos. Algo te tiene que pasar cuando tienes esos ojos de tristeza.¿Por qué dijiste antes "ya empezamos otra vez"?

-Dani, de verdad, no es nada.

-Vale, me da igual que no sea nada.Cuentamelo-dijo mirandome.

-Puff, de acuerdo.-hice una pausa- Es que están siempre peleando,especialmente mamá.Muchas veces he estado en mi cama, ya sea por la mañana antes de levantarme o por la noche al acostarme, y he escuchado a mamá gritando y pegándole a Elena. Y si papá se entrometía,acababan discutiendo.Pero es que mamá, puufff, por ejemplo, por las mañanas cuando está dandole de desayunar a Elena, si no come,¡hala! ahí va, palo va. Por otro lado, Jack y mamá. No hay momento que estén juntos y no estén peleando.A mí, todas estas escenas me duelen. Ver a Elena llorando y a mamá, papá y Jack peleando.-hice otra pausa y con lágrimas en los ojos continué-Cuando voy a casa de mis amigas,siento una sensación extraña porque los padres no están peleando como aquí están siempre, porque hay paz-de nuevo, hice una pausa-Esa sensación me gusta.

No pude contener más las lágrimas en mis ojos.

Mi hermano se sentó en la cama,a mi lado y me abrazó mientras me decía con su voz tranquilizadora:

-Tranquila.

-No sabes la falta que me has hecho.-dije abrazada a él.